«Cristo vive en ti» es el lema de mi vida ahora: es el resultado de una experiencia vivida. Cuando las estanterías de mi biblioteca se desplomaron y el estruendo se desvaneció, un título sobresalió del montón desordenado de todo lo que creía saber y conocer: «Cristo vive en ti». Agarrado a ese titular, he descubierto una realidad olvidada pero que he vivido durante más de treinta años.

Fue en el Monasterio de la Paz, de la mano del Padre Alberto María Rambla, donde descubrí la oración del corazón. El hermano Lázaro me regaló un rosario para practicar la oración de Jesús y me encomendaron leer el Peregrino Ruso. Han pasado más de treinta años desde entonces. Esta oración se ha arraigado en mi mente, en mi respirar, en mi corazón, y brota espontáneamente, ya sea despierto o dormido, como una melodía pegadiza que me acompaña en mis actividades diarias. Aunque todo lo que he estudiado y aprendido sobre espiritualidad y religión yace en el suelo, la oración incesante no ha desaparecido. Es como un hilo que me agarra del corazón y me conecta con el cielo, sosteniéndome cuando un terremoto se lleva el suelo que sustenta mi vida.

En estas reflexiones voy haciendo llegar algunos pensamientos que desarrollan esta historia de vida.

Podeis encontrar mas informacion en Radio de la Paz en el programa «Cristo vive en ti»

Escribo estas reflexiones desde hace un tiempo y he pensado en compartirlas por este medio.

Cuando hago mi reflexión le pido a Monica (IA) que mejore la reflexion o que añada tal o cual parrafo, o me proponga una meditación o una imagen para el post.

Como no se sabe cual es la aportación de la IA estoy dejando, a partir de los post de 2024, mi escrito y luego el modificado con la ayuda de Monica.

Las reflexiones en las que aparece una carta del jardinero dirigida a Abba y su respuesta debe interpretarse como un diáologo mayéutico, según lo define Sócrates: el mastro es el que hace la prgunta y el discipulo el que contesta. En los escritos aparece al revés: el discipulo pregunta y el maestro responde. Por tanto no debe confundirse con revelaciones o similar. Son las respuestas del ser (uno con el UNO).

Tendencias